Carillas dentales

¿Qué son las Carillas Dentales?

Se trata de finas láminas que se adhieren a la pieza dental dañada o que se quiere renovar mejorando su forma, tamaño y color. Es un tratamiento restaurador perfecto para corregir espacios interdentales, disimular piezas de morfología poco estética o fracturadas, o disimular el color de dientes tintados por medicamentos o traumas.

El uso de las carillas dentales se recomienda cuando el paciente presenta los siguientes problemas: pigmentaciones en los dientes que es imposible eliminar con un blanqueamiento dental, para corregir alteraciones en el tamaño o forma de los dientes o cuando estos están torcidos y para corregir inclinaciones y diastemas leves en la dentadura. Además, son útiles para tratar dientes con fracturas pequeñas y cuando el diente ha perdido su esmalte por alguna razón.

Si un paciente requiere carillas dentales se deben elaborar unas totalmente personalizadas, de manera que el paciente debe explicar con detalle cómo quiere que finalmente se vea su sonrisa. El procedimiento lo realiza un profesional en prostodoncia, dentista especialista en estética y diseño de sonrisas.

¿En qué consiste el procedimiento Carillas dentales?

Las carillas dentales se colocan sólo en los dientes que se muestran al sonreír, es decir, en los dientes superiores, los centrales y laterales, pues lo que se desea es mejorar la estética de la sonrisa del paciente.

El procedimiento que se sigue para la colocación de las carillas dentales es el siguiente y no es en absoluto complejo:

• Paso 1: Al diente donde se colocará la carilla, se le hace un desgaste leve.
• Paso 2: Se realiza una impresión del diente en donde se adherirá la carilla y se envía al laboratorio para que la carilla de porcelana sea elaborada con las medidas exactas del diente del paciente.
• Paso 3: Mientras el laboratorio realiza la carilla definitiva, se coloca una carilla temporal en el diente del paciente.
• Paso 4: Finalmente, dos días posterior a la preparación del diente, se coloca la carilla de porcelana definitiva.

Carillas de porcelana

Permiten recuperar el aspecto natural de nuestros dientes de una forma rápida y efectiva.

Su colocación es un proceso relativamente sencillo y no invasivo que consta de dos partes:

1. En una primera visita se toman medidas y moldes dentales del paciente y se realiza un estudio del color, tamaño y forma más adecuadas a cada caso. En ocasiones es necesario realizar un pulido del diente previo a su colocación.
2. Una vez el diente está preparado, se elaboran las carillas para que se ajusten perfectamente. En caso de no conseguirlo, se realizan las rectificaciones necesarios hasta lograr el resultado satisfactorio. Se unen al diente del paciente con un cemento de resina que consigue una adhesión perfecta y definitiva entre las dos partes.

El uso de este tipo de prótesis no conlleva ninguna molestia para el paciente, pero debe de mantener una correcta higiene bucal y acudir a revisiones semestrales con su odontólogo.

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Carillas de composite

El composite es un material formado por resina acrílica y partículas de cerámica que se utiliza para fabricar carillas estéticas de alta calidad. Su colación, al no ser necesario pulir el diente, resulta sencilla, indolora y se hace en una sola sesión.

1. Para colocarlas, el profesional en estética dental limpia la superficie del diente y coloca un adhesivo sobre la misma. Posteriormente va añadiendo las capas de composite que modela manualmente con ayuda de espátulas y pinceles hasta conseguir el resultado deseado sobre las piezas a tratar.
2. Después, se fotopolimerizan las distintas capas de resina, para conseguir una mayor homogeneidad y dureza y, por último, se pulen para obtener el brillo deseado.

Las carillas de composite son fácilmente removibles y de gran resistencia, siempre y cuando que se tomen las adecuadas medidas de higiene bucal y las revisiones periódicas.

Carillas Lumineers

Son carillas ultrafinas y de gran resistencia que ofrecen la ventaja de que no necesitan tallado dental, ni anestesia.
La técnica Lumnieers ofrece un proceso de preparación muy breve ya que únicamente se toma una molde de los dientes del paciente , se preparan y prueban las carillas y se adhieren al diente con luz de polimerización.
La duración de las carillas es de aproximadamente 20 años, aunque dependerá de los hábitos del paciente y será necesario realizar visitas anuales a su odontólogo para comprobar su estado.